El rastreo de los nuevos positivos.
La actual situación sanitaria que vivimos a nivel global inducida por la pandemia de Covid-19, por todos ya conocida como Coronavirus, nos ha obligado a transformar nuestra vida diaria por completo, reinventando de esta forma nuestro día a día y viendo como todas nuestras actividades cotidianas se han visto mermadas.
Sin embargo, desde el pasado 11 de mayo, algunas zonas geográficas de nuestro territorio están emprendiendo una controlada desescalada movida por la Fase 1 de contención de dicha enfermedad, en la que se deben seguir, con la máxima prudencia, todas las medidas habidas y por haber para salvaguardar el proceso de desconfinamiento y así evitar futuros rebrotes del virus. Este hecho irá otorgando a la población, progresivamente, una serie de medidas adaptadas a la sociedad y comunidad autónoma, y a su nivel de contagio con la finalidad de regresar a la normalidad cuanto antes.
Con el fin de impedir un repunte en el número de contagios y sin poder llevar a cabo la popular “inmunidad de rebaño”, ni disponer de la tan ansiada vacuna, el único modo de controlar la pandemia es frenando los contagios. Ante la dificultad de realizar test masivos o PCR a toda la población, el papel de los detectives privados es clave frente a la desescalada.
Diversas Asociaciones y Colegios de detectives privados de todo el territorio Español, han hecho llegar al Ministerio de Salud la total disponibilidad por parte de los profesionales del sector, para realizar las correspondientes tareas de contención de la pandemia, enfocadas en entrevistas personales, investigaciones rutinarias, verificaciones, controles y servicios de seguimiento.
Los detectives privados, una vez conocido un caso sospechoso de Coronavirus, emprenderán las medidas más adecuadas a cada suceso, teniendo en consideración una detallada encuesta epidemiológica en la que se conocerán datos de salud precedentes y antecedentes médicos familiares, así como también el entorno más cercano en el que se ha movido el sujeto, estableciendo así tres líneas principales de actuación: testar, rastrear y aislar en caso de hallar a sujetos que hayan sido expuestos al virus.
El colectivo de detectives privados cuenta con una larga experiencia ejecutando trabajos en los que la finalidad del mismo es la obtención de pruebas e información sólidas, eficaces y veraces.